martes, 15 de abril de 2008

Snow

Un fragmento de la novela Nieve, de Orhan Pamuk, que casi podría ser un microrrelato:

Por ejemplo, Sadullah Bey, un investigador del folklore y periodista respetado por todos los kurdos de Kars, había visto muchos golpes militares a lo largo de su vida, y en cuanto oyó por televisión lo del toque de queda se preparó para la temporada en prisión que comprendía que se le acercaba. Después de colocar en la maleta los pijamas de cuadros azules, sin los cuales era incapaz de dormir, la medicina para la próstata y las píldoras para dormir, el gorro y los calcetines de lana, la fotografía en la que su hija la de Estambul sonreía con su nieto en brazos y el borrador del libro que estaba preparando sobre cantos elegíacos kurdos, se tomó un té con su esposa y esperó viendo en la televisión la segunda danza de Funda Eser. Cuando ya bastante pasada la medianoche llamaron a la puerta, se despidió de su mujer, cogió la meta, abrió la puerta y, al no ver a nadie, salió a la calle nevada y, mientras recordaba cómo en su niñez había patinado en el arroyo de Kars observando admirado la belleza de la calle cubierta de nieve a la mágica luz color azufre de las farolas, unos desconocidos le mataron disparándole a la cabeza y al pecho.

Así que ya podéis suponer que no, que este libro todavía (voy por la mitad ya) no se me ha caído de las manos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pues date prisa: estamos impacientes por saber si llegas a la meta. Sospecho que incluso se cruzan apuestas al otro lado del canal.