Primera enseñanza: no saques fotos a tus hijos
Un hombre llamado Gary Crutchley jugaba con sus hijos en el parque, y los vio tan felices deslizándose tobogán abajo que decidió inmoralizarlos en unas fotografías. Un gravísimo error: varios padres que estaban en los alrededores le exigieron que dejara de hacerlo, acusándole de sacar fotos para luego colgarlas en internet. En algún momento incluso se oyó la palabra "pervertido". Gary les enseñó las fotos para que vieran que no había nada malo, y tuvo que llamar a su mujer para que testificara que efectivamente aquellos eran sus hijos.
Segunda enseñanza: no saques fotos a una piscina vacía
También en Inglaterra, a una adorable ancianita de 82 años, de nombre Betty Robinson, le pidieron que dejara de sacar fotos de un parque que incluye una piscina infantil... que en ese momento estaba vacía. Amablemente, le explicaron que era porque podía tratarse de una pedófila. Las autoridades de Southampton pidieron disculpas a la anciana, pero añadieron: "es apropiado que nuestro personal esté atento a quién saca fotografías".
Conclusión: tercera enseñanza: saca sólo fotografías de edificios, que no incluyan a niños ni, a ser posible, a personas humanas de carne y hueso
Quod erat demostrandum
3 comentarios:
Lo q nos faltaba q cuando nuestros amigos y familiares vuelvan de vacacciones nos aburran con fotos de mausoleos y edificios no gubernamentales!!!!Como no vamos a poder fotografiar a ninguna otra cosa o mono..snif!
jajaj
santi, felicidades;
ya tienes la excusa que necesitabas..
Me uno a las felicitaciones. A punto estuviste de nacer el 25, eh? Sólo te faltó salir agarrado al talón de tu hermano, jejeje..
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