Desde que llegué el jueves pasado no ha habido un día sin lluvia. No es que llueva todo el día, pero sí llueve todos los días, y a veces a rachas estilo "tormenta tropical". Aquí, como en Escocia, el tiempo cambia en cuestión de horas, a veces incluso de minutos: puedes mirar por la ventana y ver un maravilloso cielo azul, y verte atrapado bajo una granizada antes de llegar a la universidad.
El otro día cuando iba a salir de casa vi que hacía bueno, y pensé en ponerme las playeras, pero una vocecita (sí, oigo vocecitas, qué pasa) me dijo: "Recuerda que esto es Irlanda". Así que me puse las botas (literalmente, no figuradamente). Cuando salí del despacho unas horas después estaba cayendo agua a mares, y encima con viento, así que cuando llegué a casa tenía mojados hasta los calzoncillos.
Lo que me lleva a una reflexión filosófica profunda: ¿hemos sido capaces de poner un hombre en la Luna, de espachurrar un átomo y de descifrar el ADN, pero no somos capaces de inventar nada mejor que los puñeteros paraguas para protegernos de la lluvia? Algún becario debería ponerse a trabajar en ello...
Pedro Juan Gutiérrez: Anclado en tierra de nadie
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*Idioma original: *Español
*Año de publicación: *1998
*Valoración: *Bastante recomendable
La Habana (Cuba). Año 1994, cuarto año de Período Especial, la...
Hace 23 horas
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