viernes, 21 de septiembre de 2007

Salsa Party

Siguiendo otra de mis costumbres de cuando mandaba emails desde St. Andrews, os cuento la primera fiesta de la temporada: esta vez se trataba de una "Salsa Party" organizada por Nancy, una de las profesoras del Departamento, peruana ella, y la fiesta tenía un fin benéfico: recaudar fondos para los damnificados por el terremoto de Perú de hace un mes y pico.

Hubo música salsa, una mini-clase de baile que duró aproximadamente 3 minutos, una rifa en la que nadie sabía cuáles eran los premios, y para cenar, salchichas y patatas fritas. Y cerveza, claro. La asistencia consistía básicamente en españoles, estudiantes de español y profesores de español, o sea, todo quedó muy en familia.

Como podéis suponer, yo no bailé, ni siquiera mi mundialmente famoso paso "back-forward", o sea, un pasito p'alante, un pasito p'atrás. Varios españoles (Diego, el lector; Gonzalo, el gallego del LRA, Ramiro, el novio de la anterior lectora; Teo, investigador de Software Libre...) nos hicimos fuertes en la barra, y estuvimos ahí hablando un rato. Estuvo bien, pero eso sí, a las 12 todos para casa, que al día siguiente había que trabajar.

Cómo se nota que era una fiesta organizada por una profesora...

2 comentarios:

Mikel dijo...

Huy, a ver si lo de ser medallistas de barra fija lo llevamos en los genes!

Bueno, ya se sabe lo que dicen, la constitución de los bilbainos nos impide mover las rodillas y los codos en direcciones diferentes...

LOL!

Santi dijo...

Pues no sé yo si eso de la barra fija es un "hecho diferencial" bilbaíno, o si es algo que se extiende también más allá de la muga, porque tenías que haber visto a Ramiro, que es de Valladolid, escondiéndose al fondo de la barra de una señora que quería sacarlo a bailar...