lunes, 18 de febrero de 2008

Reasons to hate me

Para los que llevan metiéndose conmigo desde hace cosa de siete años, porque me he dedicado a "corregir bes y uves", o porque trabajaba en casa, o porque me pagan por dar diez horas de clase a la semana, he aquí otra razón para odiarme: desde hoy, gracias a dos cambios en el horario consensuados con los alumnos de los grupos correspondientes, sólo tengo clases de lunes a miércoles, y el jueves y viernes puedo dedicarme a investigar. Además, las diez clases han quedado repartidas que ni a propósito: tres el lunes, tres el martes y cuatro el miércoles.

Curiosamente, los dos cambios que he hecho fueron solicitados por los alumnos, así que yo lo único que tuve que hacer fue poner cara de estoica aceptación contrariada y decir "bueeeeeno, si insistís cambiaremos la claaaaaase". Para poder encontrar huecos que viniera bien a todo el mundo, la clase que tenía el viernes la he tenido que dividir en dos, una el lunes y otra el martes (aunque es la misma clase, de manera que sólo tengo que prepararla una vez), así que doy una hora más a la semana que antes. En conclusión, no sólo tengo una semana de tres días, sino que mis alumnos piensan que soy algo así como un santo varón mártir de la enseñanza.

Casi puedo oír el sonido de vuestros dientes rechinando por la envidia.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

ARRRRRRRGGGGGGGGGGGGGGHHHHHHHHHHARRRRRGHHHH

Góngora dijo...

Vaya, debo reconocerlo: tengo envidia, jeje. Trabajo dando clases los cinco días a la semana y no veas el poco tiempo que me deja para la wiki y para estudiar. En fin, te he dejado una respuesta en otra entrada. Por lo demás, mucha suerte y enhorabuena por los éxitos. Saludos.

Ángeles Navarro dijo...

¡qué suerte la que tienen algunos!pero lo mejor es que estas conciente de ello y asi lo puedes disfrutar muchisima mas. Exitos